Órdenes de aprehensión contra líderes yaquis por oponerse al Acueducto en Sonora
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Por Zapateando
Publicado por Zapateando
Una orden de aprehensión contra el secretario de las autoridades tradicionales del pueblo de Vícam y vocero de la tribu yaqui en la defensa contra el Acueducto Independencia, señor Mario Luna Romero, fue confirmada por un tribunal colegiado en materia penal y administrativa en Hermosillo, Sonora. Hay otra contra el también vocero yaqui, señor Tomás Rojo.
El tribunal le negó a Mario Luna un amparo contra la orden de aprehensión originalmente emitida el 14 de junio de 2013. Los delitos que le imputan son privación ilegal de la libertad agravada y robo de un auto.
Los hechos en que se basan para fabricarle ese delito son los ocurridos el 8 de junio de 2013 cuando las autoridades tradicionales yaquis, haciendo uso de su derecho a administrar justicia de acuerdo a sus normas jurídicas tradicionales autónomas (usos y costumbres indígenas), sancionaron a un indígena yaqui por una falta cometida al conducir un vehículo por la cual fue esa persona detenida, trasladada a la comisaría y sancionada por autoridades yaquis. Esos hechos, fabricados como delitos de “privación ilegal de la libertad agravada y robo de un auto” dieron lugar a la denuncia penal y la orden de aprehensión contra el señor Mario Luna Romero, defensor de los derechos indígenas yaquis y contra el señor Tomás Rojo, otro líder indígena y vocero yaqui.
Lo que verdaderamente está haciendo la autoridad sonorense es perseguir a defensores indígenas que han protestado contra la violación de una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que determinó que el proyecto del Acueducto violó el derecho de los indígenas yaquis a la consulta. A raíz de ello, la tribu yaqui se manifestó el 28 de mayo de 2013 en la autopista federal número 15 y, en represalia, les han fabricado delitos y han emitido órdenes de aprehensión a sus voceros.
La organización Fronter Line Defenders ha elaborado una acción urgente que se puede firmar en línea porque estas represalias contra los defensores indígenas yaquis son el “resultado de su trabajo legítimo y pacífico en la defensa de derechos humanos de comunidades indígenas” .